Visita a la Sima Manuel Mozo (7-01-2017)


VISITA A LA SIMA MANUEL MOZO

EL lunes dos de enero nos fuimos Saúl, Antonio y yo (Guille), a visitar la sima de Manuel Mozo.
Es una de las grandes clásicas de la zona centro y ni Saúl, ni Antonio la conocían. Además, en mi caso, nunca había llegado al meandro de la élite y le tenía ganas. Además, hacía falta matar el mono y bajar un poco los turrones.
Decidimos que instalasen entre Saúl y Antonio, para que se terminasen de foguear en estas lides. De este modo empezó a montar Saúl, mientras el resto le seguimos a unos simpáticos cero grados, pero con un sol espléndido. En apenas 45 minutos estábamos en la repisa de unión con el P45, donde Antonio tomó la delantera, instalando el resto de la sima (creo que me puedo acostumbrar a ir de señor, sin montar nada). En este pozo nos dio la sensación de que las medidas que en su día pusimos en la topo para los fraccionamientos no son del todo finas. Creemos que lo correcto es:
– Cabecera en 2 químicos
– Fraccionamiento a -2
– Fraccionamiento a -3
– Fraccionamiento a -12-15
Tras hora y media desde la entrada estábamos abajo del todo, donde dejamos los equipos y metimos un único arnés en la saca más pequeña para entrar por los meandros.
Conseguimos llegar hasta el P6, que hemos dejado instalado en fijo con dos chapas sobre dos spit. Tras bajar el pozo nos adentramos un poquito por el meandro de la élite.
Y es verdad, es de la élite. Es asquerosamente estrecho. Así que tras avanzar unos 50m decidimos dar la vuelta, y asumir que no somos de la élite (jejejeje)
Subimos y en “ná” estábamos en la base del P45, donde Saúl empezó a subir, le seguí tan pronto como me dio el libre y Antonio se quedó para currarse la desinstalación.
En la repisa nos cambiamos y Antonio pasó al medio, dejándome desequipar el tubo de la aspirina, y disfrutar del simpático péndulo que hay al desmontar.
Al subir pudimos ver como en el fraccionamiento inmediatamente anterior a aquel donde haces el péndulo para llegar a la repisa, hay un pequeño roce al subir. Se puede evitar si se separa uno de la pared con los pies al subir (o instalando un desviador en la pared contraria, que es lo que acabaremos haciendo).
Así a las cinco de la tarde estábamos en la calle, y a las cinco y media en un bar disfrutando de la cerveza de la victoria.
Me vais a perdonar, pero se nos olvidaron las cámaras de fotos.

Guillermo Reguilón

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