Comienzan por fin los trabajos en la clásica cueva del Tornero. Es una zona que compartimos con el también clásico G. E. Geológicas de Madrid. Con otro club, los trabajos siempre se hacen más amenos y el compartir es cosa que siempre enriquece.
Además esta nueva zona nos brinda la posibilidad de probar otros manjares distintos a los habituales.
Evidentemente la ilusión es mucha, pero el tiempo será quien juzgue si ese trabajo ha sido provechoso.
Quedamos el viernes para dormir en el refugio de la Fuente de Vaqueros, que es magnífico. Allí nos reunimos el equipo del GEG: Carolina, Clara, Cristina, Álvaro, Lorenzo e Isidoro; y el equipo de Viana: Fernando, Pedro, Ángel y el que os habla.
Velada en el refugio de la Fuente de Vaqueros de Checa
La velada fue magnífica y tuvimos unos y otros -unos más que otros- la posibilidad de compartir mil anécdotas en un verdadero ambiente familiar.
Gratísima tertulia con nuestros compañeros de Geológicas
A la mañana siguiente y bien dormidos, todos arriba. Dimos buena cuenta de los huevos revueltos de Isidoro y con un cafetito caliente ya en el cuerpo, todos a los coches para hacer la aproximación que parte del mirador del Río de la Hoz Seca (Checa).
Pudimos llegar en coche hasta el mismo mirador y con un día primaveral que acompañaba, fuimos de charleta hasta la boca de la cueva con una idea más o menos clara de las comprobaciones que serían nuestro objetivo en la cavidad y sus alrededores.
En la boca paramos para cambiarnos y para negociar unos estupendos bocatas del «Fogón de Filo», y sin más y a buena hora comenzamos el bonito paseo por la cavidad.
Zona próxima al Sifón Este.
No tenía mucho agua, pero nos dirigimos a los tres sifones para ver las posibilidades que nos podría dar la cueva en estiaje. De camino al sifón Mari Carmen y el sifón que parte el Sector Este vimos varias zonas en las que tendremos que trabajar.
El sifón Este tenía sus aguas más retiradas de lo que es normal para estas fechas, pero se encontraba infranqueable en cualquier caso.
Sifón Este
Desde allí nos dirigimos al sector norte o galería D5, zona en la que también queremos trabajar. El sifón Rosi estaba abierto y pudimos cruzarlo sin mojarnos.
Entrada al Sifón Rosi en la galería D5 o galería Norte
Salida del sifón
El segundo sifón de la galería Norte, sin embargo, estaba impracticable con la vestimenta que llevábamos. Fernando Vallecillos, que llevaba botas hasta la ingle, se metió en el sifón hasta el fondo, pero su la parte final la bóveda se encontraba a centímetros del agua y preferimos no hacer «espeleobuceo» sin neopreno en aguas frías.
Galería Principal
Comentando las posibilidades de trabajo
Por otro lado Isidoro y Lorenzo, los dos hidrogeólogos, fueron haciendo mediciones de ph, conductividad y temperatura del agua en todos los sifones y zonas de curso activo. Anotaron los datos para su posterior estudio.
Sin haber fijado aún un calendario concreto de de visitas a la cavidad, si se marcaron los puntos centrales de exploración y estudio, entre los que está el levantamiento de una nueva topografía completa de la cavidad.
